Perrito que fue abandonado por sus dueños no para de abrazar a quienes lo rescataron

Este es la historia de un perrito llamado Clarence. A pesar de los malos tratos que recibió de parte de sus antiguos dueños y todo su rechazo, no deja enamorar a los humanos con los que se cruza y les da los abrazos más sinceros.
Clarence fue abandonado por su familia en un estacionamiento de un Waltmar. Al encontrarse solo decidió vagar por las calles en busca de algún alimento para saciar su hambre.
En las calles se encontró con dos peros callejeros con quien decidió formar una especie de familia.

Entre las penurias y necesidades, el trío logró sobrevivir durante meses a la dureza de las calles, pero un día la patrulla de control animal los localizó y los sacaron de las calles.
Clarence, lejos de temer o mostrar agresividad solo quería abrazar a los hombres de la perrera. No sabemos si en agradecimiento por haberlo sacado de las calles.
Lo triste es que en el momento en que del refugio se comunicaron con sus dueños (gracias al microchip implantado en Clarence), no quisieron ir por el perrito. No les interesaba para nada recuperarlo y admitieron haberlo dejado en un estacionamiento. Dado el rechazo de sus antiguos dueños, el peludo pasó a la lista de sentenciados.

Si nadie lo reclamaba o decidía adoptarlo le aplicarían la eutanasia. Pero la vida le daría una segunda oportunidad a Clarence y todo gracias a Hounds In Pounds, un centro de rescate ubicado en el estado de New Jersey, Estados Unidos. Los voluntarios se enteraron de la historia y decidieron ayudar al trío.
Por desgracia, solo pudieron salvar a Clarence y a un perrito pastor alemán, ambos fueron trasladados al refugio de la organización.
El otro compañerito tuvo un final trágico por una aparente enfermedad.
Clarence experimentó por segunda vez lo que significaba ser rescatado y ahora sí por personas que le prometían un futuro mejor. Pese a todo el trabajo pasado, el perrito seguía siendo tan tierno como siempre.
“Es dulce, gentil y está muy agradecido de estar a salvo con nosotros. No podemos evitar perdernos en el pelaje dorado de Clarence, nos recuerda a la luz del sol y amamos su personalidad”, “Es brillante, cálido y trae luz a quienes lo conocen”, dijo Cat Suzuki, fundadora del refugio.

Suzuki viajó hasta Georgia para rescatar al peludo, pues no podía dejar que tuviera tan terrible desenlace. Aunque la idea de conocerlo la había entusiasmado mucho, la mujer no imaginaba lo amable y bondadoso que era Clarence.
Tanto ella como los demás cuidadores aseguraban que Clarence, era el compañero ideal para cualquier familia, pero que tendrían que consentirlo mucho porque le encanta ser centro de atención.
Así de consentido es este can que abraza a todo humano que le inspira seguridad.
Tras el rescate, la Suzuki sabía que debía hallar a una familia encantadora para este angelito que además podría ser el mejor compañero en diferentes aspectos.
“Es bastante perezoso, por lo que un amigo de películas o un compañero para acurrucarse, sería ideal”, dijo la rescatista.

Después de semanas de búsqueda, llegó al refugio el perfil ideal para convertirse en los humanos de Clarence.
Una familia amorosa apostó por este perrito y enamorados decidieron adoptarlo. Después de años viviendo en un patio y después en la calle, el chico de cuatro años había encontrado a las personas que responderían a su amor. El perrito vive ahora feliz y recibe las atenciones y cuidados que siempre mereció.
