Hombre llevo a cabo su promesa de volver por su perrito que se vio obligado a dejar en un refugio

Un hombre tuvo que separarse durante un tiempo de su fiel canino. Pero al final pudieron tener un final feliz.
Lewis Jiménez adoptó a un perrito de raza pitbull cuando tenía 8 meses de edad y se encontraba en un refugio llamado “Austin Animal Center”. Desde ese entonces se convirtieron en amigos inseparables y entre juntos velaron por su bienestar.
Sin embargo, en el año 2017 tuvieron que vivir una situación realmente desgarradora. Pues,un vecino dijo que no quería vivir cerca de un pitbull y con mucha frecuencia le pidió a la administración del vecindario que los sacaran.
Tanto así que Lewis recurrió al sacrificio de sacar a pasear a su perro llamado Titus a las 4 am.Esto con el objetivo de impedir que no se cruzara nunca con ese vecino.
No obstante, un día el nieto de Lewis, el cual tiene 10 años de edad, sacó a pasear al perrito y se toparon con aquel vecino. A causa de ello,él se volvió a dirigir a la administración diciendo que el peludo le había mordido uno de sus dedos.
A raíz de esa situación, el hombre y su familia fueron notificados de una posible orden de desalojo. Por tal razón,se vieron obligados a volver a llevar al perrito al refugio mientras que podían conseguir otra casa.
Pero, Lewis le manifestó a su perrito que iba a volver para él para que fueran tan felices como siempre.

En la organización entendieron desde el principio la situación de Lewis y, por lo tanto, volvieron a acoger a Titus con todo el amor del mundo.
De esa manera,el perrito siempre estuvo rodeado de alimentos de calidad y de los mejores cuidados. Además, también le proporcionaron todos los juguetes que necesitaba para distraerse.
Adicional a ello, su dueño siempre iba a visitarlo con frecuencia. Pues, lo que menos quería es que su perrito se olvidara de él y de la promesa que juntos tenían.
No obstante, a pesar de todos esos intentos por cuidar su bienestar emocional, era evidente que Titus no podía ser del todo feliz. Esto ya que extrañaba estar segundo a segundo al lado de su persona favorita.
De igual manera, el estado anímico de Lewis no era el mejor porque no solo no podía estar viviendo con su perro, sino que temía que otra familia se interesara en él y lo adoptara.
Sin embargo, por fortuna nada de eso pasó. Tras 4 meses de la dolorosa separación, Lewis pudo conseguir una casa en la que no le ponían ningún problema por vivir junto a un pitbull. Por tal motivo,se dirigió de inmediato al refugio y volvió a adoptar a su perro.

Y, como era de esperarse, la alegría del perrito fue inmensa. A raíz de ello,corrió a los brazos de su mejor amigo y juntos se dieron un fuerte abrazo.
Debido a ese feliz desenlace, hoy en día Lewis y Titus se la pasan disfrutando de su compañía. Además, se demuestran en todo momento que su amor es el más puro del mundo.
En consecuencia de ello, el refugio dio a conocer ese gran final a través de sus redes sociales. Esto con el objetivo de demostrar una vez más que el cariño entre los perros y sus dueños es para toda la vida.