Amoroso cachorrito le gusta llevar a cuestas a su mejor amiga,una paloma

by Katty 4 de abril de 2021 0 Comment 7 min read

Estos dos animales son tan pequeños que se han vuelto inseparables, a Lovey le gusta subirse en la espalda de Alfie para que lo pasee por toda la casa.

Sue es el fundador de The Mia Foundation, en donde se alojan estos dos animalitos.

La paloma llamada Lovey, es huérfana, fue encontrada por el personal de construcción, luego de que removieran su nido, su madre jamás volvió.

El refugio recibió a esta palomita, ellos pensaron que después de que Lovey aprendiera a comer y a volar se iría.

Pero Lovey cada vez que volaba siempre regresaba al refugio. Ella es libre en el refugio, puede caminar y volar por toda la casa, se siente muy segura estando ahí.

Debido a que es muy pequeña siempre ha tenido un poco de temor de acercarse a los demás animales.

Hasta que en el refugio apareció un cachorrito de nombre Alfie, que a pesar de tener 8 semanas parece un cachorrito recién nacido.

Sue comenta que el cachorrito tiene el paladar hendido y está casi segura de que el pequeño tiene hidrocefalia y que posiblemente tenga una afección cardiaca.

El cachorro poco apoco se está haciendo más fuerte, pero debido a que es muy pequeño no puede jugar con los otros perros de la casa.

“Alfie necesitaba empezar a socializar, así que lo dejé correr por la casa todo el día bajo supervisión. Siempre hay que tener mucho cuidado y vigilarlo”, agregó Sue.

Alfie desde que conoció a Lovey han desarrollado un vínculo muy especial e incluso se comunican en su propio lenguaje y un estilo de juego único.

“Lovey se la pasa volando por la casa durante el día y me di cuenta de que cada vez que ponía al cachorro en el suelo ella volaba inmediatamente hacia él”.

“Posiblemente ella cree que es otro pájaro porque es del mismo color y aproximadamente del mismo tamaño que ella. Lovey no interactúa así con ninguno de los otros peludos de la casa», agregó Sue.

A Lovey le gusta subirse a Alfie para que la lleve a cuestas o perseguirlo por la casa, ulular suavemente y picotear su pelaje.